Los problemas familiares que derivan en problemáticas jurídicas son muy delicados y requieren de experiencia, especialización y de una atención personalizada. Separaciones o divorcios, modificación de medidas, impagos de pensiones de alimentos, son solo algunas de las difíciles situaciones en las que se colocan las familias. No es fácil tomar decisiones, pero es inevitable y hay que mejor hacerlo con el mejor asesoramiento posible.
Separación, divorcio y nulidad civil.
Regímenes económico-matrimoniales y liquidación de patrimonio común.
Crisis matrimoniales entre cónyuges de distinta nacionalidad.
Uniones de hecho: medidas paterno-filiales.
Custodia compartida.
Impago de pensiones, incumplimiento de resoluciones judiciales.
Modificación de medidas.
Procesos sobre filiación, maternidad y paternidad.
Incapacidades de familiares y procedimientos de modificación de la
capacidad.